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Durango será una casa más conectada y digna con la nueva avenida Río Grande, afirmaron Toño Ochoa y el gobernador Esteban Villegas, al dar inicio a la primera etapa de esta obra que unirá la carretera México con la carretera Mezquital, beneficiando a más de una decena de colonias y fraccionamientos.
“Esta vialidad se traduce en una sola palabra: dignidad para la gran familia. Más de 123 mil personas van a mejorar su conectividad y su vida diaria. Son obras que marcan un antes y un después en la ciudad”, expresó Toño Ochoa, al destacar que esta etapa contempla pavimentación con concreto hidráulico y una inversión cercana a los 11 mdp.
“Estamos muy contentos porque muchos sueños se están haciendo realidad. Esta vialidad ha sido anhelada por años, y hoy por fin arranca”, agregó Esteban Villegas, al reconocer el trabajo coordinado entre gobierno municipal y estatal.
Por su parte, el director de Obras Públicas, Javier Chávez Cibrián, explicó que esta obra no solo contempla pavimentación, sino también una mejora integral del entorno: “Hoy damos un paso firme hacia el desarrollo y el bienestar de las familias”.
A la par, Aguas del Municipio invertirá 6 mdp en infraestructura hidráulica y sanitaria, para garantizar servicios básicos de calidad, informó Rodolfo Corrujedo, titular del organismo.
Vecinas como Gabriela Elena Carreón celebraron este avance: “Me emociona saber que mis alumnos llegarán puntuales y con los zapatos limpios. Esto transforma nuestra vida”.
Con acciones como esta, el Gobierno Municipal y Estatal confirman que el trabajo en equipo construye un Durango con más conectividad, desarrollo y bienestar para la gran familia.